Política Joviana

El gobierno de la República se asienta sobre el Senado, los gobernadores, y los senadores, aunque hay otros cuerpos son parte del gobierno también (CBEAT, JCC, CDR, IFS...) o tienen influencia (la Iglesia), o son cercanos (TAHI).

EL SENADO

Cada hábitat miembro de la República elige por votación tres senadores que son enviados al Senado (en Libertad, Ganímedes).

La mayoría de los senadores provienen de familias que tienen dinero o influencia. Para ser elegible para postularse como Senador, un ciudadano debe ser debidamente investigado y recibir el sello de aprobación de la oficina del Consejo de Seguridad que lleva estas cuestiones. Es un secreto a voces que varios lobbys juegan un papel influyente en este proceso, lo que significa que es probable que cada senador esté en deuda con al menos media docena de intereses especiales.

Aparentemente, el Senado es completamente democrático. Los senadores representan los intereses de su hábitat y hablan en su nombre, pero a la hora de la verdad, falta implicación ciudadana. Un senador no tiene la oligación de reunirse con ningún votante, ni atender sus comunicaciones, y el senado no está abierto al público.

La forma que tiene un ciudadano (solo los ciudadanos) de garantizar su acceso a los cargos electos es registrarse como cabildos, (lobbystas) y actuar. La legislación exige que si se realizan frecuentes contactos con los senadores el ciudadano deba registrarse como cabildo. Naturalmente, la mayoría de cabildos son asalariados de los lobbys, actuando a favor de su empresa.

El Senado tiene a su disposición la Oficina de Cuentas del Senado (SAO). Dirigida por Eustacia Wibble, que responde ante el Presidente del Senado. (Se puede ver su organización en Firewall pag 137) No es formalmente una agencia de inteligencia, pero a efectos prácticos lo es, persiguiendo corrupción, tráfico de influencias, y malversación.

LOS GOBERNADORES

Mientras que los senadores de un hábitat se preocupan por sus intereses en Libertad, las operaciones cotidianas del hábitat están en manos de un gobernador. Los gobernadores son nombrados por el Senado con la aprobación del Consejo de Seguridad.

O al menos según la Constitución Joviana. En realidad, el Consejo de Seguridad envía al Senado una lista de candidatos nominables para que la debata, o incluso ejercen presión para que salgan electos sus preferidos.

Los gobernadores reciben presiones del Consejo de Seguridad de la misma manera que el Senado recibe las suyas de los lobbys y la Iglesia. Los gobernadores son de facto jefes militares de su hábitat a menos que un oficial de mayor rango pase a visitar, lo que significa que están a cargo de la sucursal local del CDC y son responsables de cualquier disturbio civil.

EL CONSEJO DE SEGURIDAD

El Consejo de Seguridad es la cúspide del poder en La Republica. Aunque nominalmente dejan el gobierno y asuntos legislativos para el Senado y los gobernadores, no cabe duda de que la palabra del Consejo de Seguridad es ley. Cualquier cuestión de seguridad para la República queda bajo competencia del Consejo de Seguridad. Y en la República Joviana es sencillo que cualquier cosa sea una cuestión de seguridad.

La ubicación del Consejo, sus reuniones, decisiónes, y operaciones están protegidas como secreto de estado. Tienen su propio cuerpo de inteligencia (SCI) y oficinas para diversos trámites (como autorizar a quienes quieran presentarse como senadores).

No se habla de quienes forman el Consejo, si no que la entidad permanece indefinida, proyectando una autoridad como ente, sin definirse las personas que lo forman, pero parece claro que el Consejo lo forman los 7 militares que dieron el golpe que formó la República en 1 DC definiéndola como es hoy día (puedes leer sobre ellos en Rimward pag 41).

General Monica Contreras. Coronel de la Fuerza Espacial Chilena y principal artífice del golpe. 

General Gavin Brown. Norteaméricano que luchó en la órbita terrestre al inicio de La Caída, debiendo retirarse ante los TITAN.

General Adam Westmoreland. Comandante de la JSF. Se le atribuyen varios interess económicos especialmente fuertes con la minería Joviana.

General Sergio Cauas. Comandante del CDC. Firme católico y amigo personal del Papa.

Director Zane McFarlane. Comandante del SCI. Antiguo analista de campo de la CIA, y unico miembro del Consejo que no mantiene su cuerpo original por haber llegado teleyectado a Júpiter en 1 DC. 

Director Marcelo Vasena. Jefe de Operaciones. Supervisa la logística del Consejo, el entrenamiento en el SCI, CDC, y la Fuerza Espacial. Se encarga de suministros, armamentos, astilleros, recaudación de impuestos... Fue ayudante del Presidente de Colombia. 

Directora Wendy  Gilder. CTO. Antigua CEO de la Corporación RAND, ahora es la Jefe de Tecnología del Consejo. En relación directa con el CBEAT, participa en todo lo relacionado con la tecnología; legislación, desarrollo, implantación, especificaciones...

Consejo de bioética y tecnología avanzada

El CBEAT es un consejo muy respetado en la República, formado por científicos, filósofos, y expertos laicos, muchos de los cuales tienen experiencia como asesores políticos en la Tierra. Son más influyentes en sus recomendaciones que la Iglesia, y son más sabios en la forma en que presionan a través de los medios, los gobernadores, y el Senado para lograr sus objetivos (restricciones legales, o veto a ciertas tecnologías.

El CBEAT es conservador, prefiriendo acercarse a las nuevas tecnologías con prudencia y cautela. Se encargan de probar las nuevas tecnologías antes de aprobarlas (en lo que son muy precavidos, limitando con facilidad los nuevos avances) lo que les pone bajo presión de corporaciones Jovianas, y sobre todo hypercorps del sistema interior que han sido aprobadas para trabajar en la República. Como el Consejo de Seguridad apoya firmemente al CBEAT, las hypercorps han aprendido que presionar en exceso al CBEAT solo puede servir para que el CBEAT se queje y la hypercorp vea su licencia anulada y sea expulsada de Júpiter.

El CBEAT es dirigido por Salvador Morteña, que tiene bajo su cargo la Oficina de Investigaciones del CBEAT, dirigida por Dick Shiman (Se puede ver su organización en Firewall pag 134), una oficina de inteligencia civil que persigue el uso de tecnologías restringidas y prohibidas, las presiones de los lobbys, y el desarrollo de nuevas tecnologías. 

Instituto de Patrimonio Ancestral Terrestre

Si bien el Consejo de Seguridad tiene su propio servicio de inteligencia (el SCI) las operaciones encubiertas mas comprometedoras en caso de salir a la luz, los dejan en manos de un grupo de presión paramilitar, el TAHI (Instituto de Patrimonio Ancestral Terrestre).

El TAHI actua como un lobby bioconservador, pero sus agentes no declarados son casi totalmente ex-oficiales militares bien entrenados en operaciones, y de lealtad probada.

Además de servir en operaciones donde el Consejo no pueda verse envuelto, sirve también como barrera contra un golpe desde dentro de la República. No siendo parte del gobierno, el Senado no tiene ningún poder de supervisión sobre ellos. Los operativos del TAHI están bien respaldados políticamente, bien financiados, y no están nada contentos con el estado actual de las cosas.

Como entidad pública, el TAHI recientemente ha comenzado una campaña para reescribir el plan de estudios en las academias militares, mientras apoyaba los discursos políticos que acusan a varios senadores de ser "conspiradores con la transhumanidad" impidiendo solucionar las cuestiones sociales de la República. También se han involucrado en detener algunas de las investigaciones en curso sobre la Lanza de Longinus.

El TAHI tiene un doble rasero; están a favor del bioconservadurismo mientras que sus agentes usan modificaciones en sus cuerpos sin limitaciones, y esconden backups, considerándose herramientas de su lucha. Donde los agentes del SCI usan tecnologías prohibidas, los hombres del TAHI no tienen límite en las modificaciones que hacer en sus cuerpos, o en el uso de cualquier biomorfo, mientras que la parte pública del TAHI pide la encarcelación indefinida de cualquier transhumano y acusan al Senado de laxitud.
Mantienen contacto y afinidad, con un grupo de bioconservadores que desertaron de la Flota Joviana por cuestiones políticas, exiliándose en el cinturon de Kuiper como piratas.